El relato comienza en una casa muy pobre donde vivía un vidriero, su mujer y sus dos hijos. Eran relativamente felices aunque en las ferias no vendían nada. Sus hijos eran muy pequeños y se llamaban Klas y Klara. Eran curiosos y durante una feria especialmente fructífera decidieron dar una vuelta sin siquiera pensar en las consecuencias (hecho muy comprensible debido a su edad).
Pero ellos no sabían que con su pequeño paseo ocasionarían mucho dolor a sus padres por cuestiones que no puedo rebelar ya que se trata de que os atreváis a leer la historia vosotros mismos.
Lo que si os voy a decir es que recibirán ayuda de un personaje tan fascinante como inquietante.
Los protagonistas son Klas y Klara, niños como cualquier otros pero que por culpa de un misterioso Señor ven cambiar su futuro y son conducidos a un extraño e indeseable (para cualquier niño) destino en la Ciudad de Todos los Deseos.
Lo cierto es que me esperaba algo mejor teniendo en cuenta la opinión tan buena que tengo de María Gripe. Sin embargo me siento decepcionada ya que esperaba una historia mas fácil de comprender y más sencilla. Se nota algo liosa y eso hace que tengas ganas de dejar de leer el libro y cambiar de lectura. Aunque si hay que sacarle algo bueno a la historia eso sin duda alguna son los personajes, están bastante trabajados y son muy diferentes unos de otros. Mi preferido es Aleto Brisalinda de la que desgraciadamente para vosotros, no voy a contar nada.
No hay comentarios:
Publicar un comentario